IXª CONFERENCIA PROVINCIAL ESPAÑOLA


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Llamados a vivir en una comunidad fraterna
Salamanca, 2 al 6 de julio de 1999

NOTICIA DE LA IXª CONFERENCIA PROVINCIAL

"Nuestra profesión de los consejos evangélicos, vivida en comunidad, es la primera expresión de nuestra vida apostólica: ya que atestigua la presencia de Cristo y anuncia el Reino de Dios que viene" (Cst. 60).

Durante los días 2 a 6 de julio de 1999, en nuestra Comunidad del Escolasticado de Salamanca, se desarrolló la IX Conferencia de la Provincia Española. Se han reunido un total de 65 religiosos, procedentes de todas las comunidades locales de España, así como representantes de la Región de Venezuela y de la misión de Ecuador. Se contó igualmente con la presencia de los PP. Manuel N. Quintas, provincial LU, Fernando Fonseca, maestro de novicios LU, Georges Deptula, provincial de la nueva Provincia de Europa Francófona (EF), formada por las antiguas provincias GA y LW, y el Asistente General, P. Umberto Chiarello.

Llegados en el atardecer del primer día del recién estrenado mes de julio, el clima de fraternidad y de bienestar se respiró desde el primer momento. Al día siguiente se celebró la solemne Eucaristía de Inauguración de la Conferencia Provincial, presidida por el P. Provincial español, Aquilino Mielgo Domínguez. Constituida la mesa de presidencia de la Conferencia dieron comienzo las sesiones de trabajo. Durante los dos primeros días el Departamento de Investigación Sociológica (DIS) del Centro Loyola de Madrid, expuso el trabajo realizado sobre la vida comunitaria de nuestra Provincia. Este estudio quiere servir, dada su calidad científica y valor, como punto de partida para renovar nuestra vida comunitaria a partir de una conversión profunda en nuestras actitudes y corazones. La conferencia debatió sobre los resultados del estudio sociológico y determinó los puntos más esenciales que deben tenerse en cuenta. Para ello ofreció una serie de reflexiones a sus cohermanos de la Provincia, puntos positivos y negativos de nuestra vida comunitaria, así como unas líneas-fuerza de acción para renovar esta vida común. En esta línea de examen de nuestra vida, de nuestro ser, en la tarde del domingo tuvo lugar una mesa redonda donde cuatro laicos y una religiosa Sierva del Sagrado Corazón de Jesús expresaron su opinión acerca de nuestra vida comunitaria, de nuestro estilo, de nuestro servicio, en una palabra, de cómo nos ven. Al término de las jornadas, la asamblea aprobó un Documento final para la reflexión sobre la vida comunitaria.

En los días sucesivos el centro de la reflexión lo ocuparon el laicado dehoniano y las estructuras de gobierno. La Conferencia quiso aclarar los términos en que debemos organizamos y comprometemos conjuntamente para animar, coordinar y estructurar los Laicos Dehonianos en nuestra Provincia, lograr una definición o aproximación al perfil que deben presentar. En cuanto a las estructuras de gobierno se estudiaron dos propuestas de cara a examinar la oportunidad de modificar las tomas de posesión tanto del gobierno provincial como del local. Conscientes de vivir el "hoy de Dios", la Conferencia quiso concluir su trabajo con una invitación a responder de nuevo al Señor Jesús que, presente en medio de nosotros, nos ha llamado a vivir en una comunidad fraterna.

Salamanca, 6 de julio de 1999. 

NEW FROM THE NINTH PROVINCIAL CONFERENCE

"Our profession of the evangelical counsels lived in community is the primary expression of our apostolic life: it testifies to the presence of Christ and announces the coming of God's reign" (Const. 60)

From July 2 thru 6, 1999, the Ninth Conference of the Spanish province took place at the Scholasticate in Salamanca, Spain. Sixty-five religious gathered there representing the local SCJ communities, as well as the Region of Venezuela and the mission in Ecuador. Also attending this gathering were the provincial and novice master from Portugal, Frs. Manuel Quintas and Fernando Fonseca, and Fr. Georges Deptula, provincial of the newly formed province which included France and Luxembourg, and Fr. Umberto Chiarello, the vice-general.

Arriving in the late afternoon of July 1, there was a climate of brotherhood and welcome from the beginning. The next morning, the conference began with the celebration of Eucharist presided by the Spanish provincial, Fr. Aquilino Mielgo Dominguez. The leadership committee of the Conference was established and the work sessions began. During the first two days of the conference, the Sociological Department of Investigation from the Loyola Center of Madrid made a presentation on community life in our province. From a scientific standpoint and value, this presentation helped to make deep conversion of our attitudes and hearts. The conference also discussed the results of the sociological studies and presented the most important points of which we should be aware. A series of reflections were offered to the members of the province both on the positive and negative points in our community living. From this discussion, certain action statements were drawn up to renew our commitment to community life. Through this examination of our life and purpose, a roundtable discussion took place on Sunday afternoon. Four lay people and a religious sister from the Servants of the Sacred Heart of Jesus expressed their opinions on how they see our SCJ community life, our service, and, in other words, how they see us. At the end of the day, the asssembly approved a final document of reflection on community life.

In the days ahead, our reflections centered around lay Dehonians and governmental structures. The conference sought to clarify the terminology of how we should be organized and committed to animate. coordinate, and put into structures the lay Dehonians in our province, as well as achieve a definition or profile of how they can be presented. In regards to the govenrmental structures, two proposals were studied for taking office on the local and provincial levels. Conscientious of living the "TODAY OF GOD", the conference ended its work with an invitation to renew our response to the Lord Jesus who, present among us, has called us to lived in community life.

Salamanca, Spain, July 6, 1999