Having the opportunity to attend an international meeting like this always reinforces my understanding that I belong to a world-wide congregation and not just a geographical province. The provinces of Europe and South America still use traditional phases of formation like the postulancy, novitiate, and post-novitiate formation. The North American reality deals with smaller numbers and allows for a candidacy period instead of a formal postulancy. The novitiate and post-novitiate have the same expectations. In a unified fashion, we all want to instill the values of a Dehonian life and spirituality with our students. We differ in the means used to teach our seminarians about reparation, oblation, and the social efforts of the Founder.
I find it interesting that whether we come from formation settings in a metropolitan area or missionary country, we want to spread the mission of Fr. Dehon with enthusiasm and a deep sense of spirituality. I find it disappointing that there are still obstacles because of language. How much more could I learn from another SCJ formation director if I could speak his language?
Coming to Rome was an opportunity to connect with confreres I had met through my travels to Brazil, Argentina, and some of the European provinces. There are new people I have met especially from the Spanish, British-Irish, and South African provinces that have been enjoyable and engaging in conversation.
I have felt that formation is a ministry of accompaniment with the individual along his path of discernment. Perhaps, what I can take back to the other members of our formation commission is the challenge of using the model proposed by Fr. Amedeo Cencini of educating-forming-accompanying the seminarian on his journey of service through our SCJ congregation. I felt affirmed by the fact that formation directors from other provinces value faith sharing and personal dialogue as means of discovering one's call to our Dehonian community life.
My hope is that our SCJ seminarians in the US province will be able to grasp and value their participation in a world-wide congregation. May they experience the internaltionality and communion suggested by the General Plan known as "We, the Congregation..."
[Note: Juan used a set of questions meant as a guidline. Therefore his answer appears as a response to a series of questions.]
1. Este encuentro es una oportunidad para participar en el proyecto "Nosotros Congregación " y especialmente en este tema que hace a la Formación y es prioritario. Lo mismo pienso desde el trabajo que hacemos en la Provincia AU y en nuestra area geográfica donde se hace el esfuerzo por compartir y ayudarnos recíprocamente. También creo que desde la perspectiva de la espiritualidad dehoniana y de la misión es un estímulo para poder responder a la nuevos desafíos que vienen de la realidad del post-modernismo, de la cultura juvenil y de la vida de la Congregación.
2. La riqueza del Carisma y de la Congregación que se manifiestan en la internacionalidad de las experiencias y del modo de inculturación es un signo de la "acción del Espíritu" y aportan elementos nuevos y particulares que nos animan a un diálogo rico e interesante entre los formadores. Un aliento nuevo se percibe en todo lo que ha ido surgiendo, especialmente en respuesta a estos desafíos y a la obra misionera. Los valores dehonianos vividos sobre todo en el apostolado social y en la inserción de las disintas culturas nos dan esperanza y renuevan nuestra entrega en este servicio.
3. Lo mas interesante para mi es este tiempo de dialogo, intercambio y de crecimiento. Es un verdadero tiempo de formación permanente para los formadores. Los materiales y las experiencias compartidas nos enriquecen.
4. La sorpresa mas grande viene por todos los "signos" de esperanza que surgen de las obras nuevas. La riqueza del carisma que es compartido hoy también por la Familia Dehoniana, la apertura misionera y los gestos de solidaridad que se han testimoniado.
5. Nos hemos encontrado con nuestros hermanos formadores de L.A. pero también con los otros con los cuales hemos compartido nuestro tiempo de formación y preparación en Roma de distintos países del mundo. Es muy lindo recuperar este tiempo para poder dialogar e interesarnos por todos.
6. Estoy aprendiendo especialmente desde las nuevas situaciones que fueron presentados a partir de esta realidad mundial, particularmente desde la cultura juvenil. La exigencia de una verdadera experiencia de Fe vivida en el mundo de hoy y la actualización y aporte de la espiritualidad dehoniana como lo ha sugeridio el P. Virginio son de los temas mas importantes. Hay sin duda una cantidad de elementos que trataré de proponer al equipo de formación de la provincia y mi trabajo específico en la formación.
7. El aporte desde nuestra experiencia de equipo formativo de la provincia AU ha sido tal vez la experiencia formativa que integra la espiritualidad dehoniana a la formación en el apostolado y la misión, la experiencia del noviciado que compartimos con Chile y Brasil y la apertura a las misiones.
8. Creo que un tema importante es llegar a proponer las líneas básicas para cada etapa formativa, el programa formativo de la congregación. También algunos temas de estudio como la misión específica SCJ desde el trabajo de la formación. Son temas que seguiremos trabajanso en el equipo formativo de la provincia, y seguramente con el aporte de todas las comunidades que deberán aportar al mismo.
9. En este proceso de mediación al que fuímos "llamados" buscamos vivir con fidelidad nuestro ministerio al servicio de toda la congregación, así como uno lo hace en su propia comunidad formativa. Esto exige una verdadera corresponsabildiad. En esto necesitamos la ayuda de todos para ejercer el ministerio del discernimiento y obrar con la sabiduría que nos viene de Dios por la Oración y la fraternidad vivida en comunidad. La RFG y la de nuestras provincias son ricas en contenidos y propuestas para desarrollar este proyecto. Seguramente este plan formativo ayudará a crecimiento y respuesta que buscan nuestros formandos.